Comprender su personalidad puede ayudarle a hacer que su fuerza de voluntad trabaje para usted. Reconocer y aceptar que eres espontáneo e impulsivo, por ejemplo, puede ayudarte a anticipar cuándo tu fuerza de voluntad puede ser desafiada. Usted puede usar su fuerza de voluntad para evitar ir de compras, con el fin de ahorrar para unas vacaciones de aventura. De este modo, usted fomenta su búsqueda de excitación o estimulación de una manera que, en última instancia, es más enriquecedora que otro viaje a las tiendas.
Maximizar tu fuerza de voluntad es mejorar tu bienestar, no convertirte en un robot predecible y aburrido. No se trata tanto de la abnegación como de elegir cuándo y dónde puedes tener experiencias satisfactorias, placenteras y enriquecedoras.
Cinco dimensiones, o factores relativamente independientes, definen su personalidad y la de los demás. La mayoría de la gente está en la zona media en lugar de en los extremos, pero las personalidades en los extremos ayudan a definir a los que están en el medio. Los Cinco Grandes pueden ser combinados para formar el acrónimo OCEAN (o CANOE si lo prefiere!):
Apertura: Esto se refiere a estar abierto a nuevas experiencias. Si usted tiende a buscar experiencias nuevas o diversas, y encuentra las rutinas aburridas y aburridas, es probable que sea fuerte en este atributo de personalidad. La apertura, como cualquiera de las cinco grandes, no es necesariamente el mejor rasgo de personalidad en todas las situaciones. Si estás en lo alto de esta dimensión, es posible que te distraigas fácilmente. Esto puede debilitar la fuerza de voluntad en algunas situaciones en las que un enfoque más estrecho y realista es mejor. Seguir una receta compleja en la cocina, por ejemplo, requiere que se centre en los ingredientes y las cantidades y en completar los pasos en la secuencia correcta. Usted siempre puede ser imaginativo en su elección de vino! Conciencia: Si eres fuerte en esta dimensión, es probable que seas confiable, auto-disciplinado y orientado al logro. Usted puede ser un poco menos espontáneo y descubrir que es perturbador si un plan cambia o se deshace. Si no eres fuerte en esta dimensión, puedes ser bastante despreocupado e impulsivo. Extraversión: Esta es una de las características más conocidas de la personalidad. Los extravagantes son sociables, asertivos y extrovertidos. En el otro extremo de la escala, los introvertidos pueden ser reservados y sentirse cómodos estando solos. Aceptabilidad: Esta característica de la personalidad refleja el grado en que alguien es amistoso y compasivo en vez de ser más crítico, de mente dura o cruel. Claramente, una disposición desagradable puede ser problemática dentro de una familia o en el lugar de trabajo, pero ser demasiado agradable – decir sí cuando se debe decir cortésmente no – puede causar problemas a su debido tiempo. Neuroticismo: Usted puede llamar a esto sensibilidad emocional, porque el adjetivo neurótico parece crítico. Independientemente del término utilizado, la capacidad de respuesta emocional de uno mismo y de los demás es claramente un aspecto definitivo de la individualidad y la personalidad. Si con frecuencia experimenta sentimientos de tristeza, ansiedad o ira, quizás a diario, esto probablemente refleje la influencia de esta característica de la personalidad. En el otro extremo, la falta de sensibilidad emocional significa que es posible que no seas capaz de sentir empatía por los demás o de experimentar toda la gama de emociones que enriquecen la experiencia humana. No existe un perfil de personalidad ideal para ofrecer un suministro constante de fuerza de voluntad, pero los extremos en cualquier dimensión pueden causar problemas.